San Blas será la tumba de los ‘menas’». Esta consigna se oyó en Madrid, en el barrio de San Blas, este pasado 16 de octubre cuando un grupo de neonazis y simpatizantes se dirigió a una casa que previamente había sido señalada como hogar de acogida de menores no acompañados. La Policía no intervino, como viene siendo costumbre, en este tipo de incitaciones al odio y a la violencia contra menores migrantes. Algunos medios de comunicación describieron a este grupo de neonazis como «vecinos preocupados por la violencia de los ‘menas’», normalizando de esta forma dos cuestiones preocupantes: una, que la manifestación fuera convocada por un grupo neonazi cuyas consignas eran amenazas directas de muerte contra niños y adolescentes; dos, que ‘mena’ se utilice como neologismo para designar un grupo indefinido, criminalizado y por tanto objeto de odio, borrando así la condición humana y singular de cada persona que conforma ese grupo, también obviando que son niños, niñas y adolescentes sin tutela ni vínculo familiar, sin padres o madres que los protejan, eduquen o socialicen, todos con infancias rotas, traumatizados por experiencias de violencia, desarraigo, pérdidas, abandonos. Leer más